Muchas veces, se atascan los procesos de envíos, se saca el trabajo adelante de la forma más rápida posible para responder a los clientes pero se va perdiendo productividad. El almacén, que debería ser La Meca del orden y el aprovechamiento del espacio, se va volviendo caótico. Pero llega un punto en el que no sabemos cómo organizarnos para responder a todas las necesidades. En esos casos, es posible que el slotting cubra nuestras necesidades logísticas.
¿Qué es el slotting en logística?
Se refiere a una estrategia de gestión que se pone en práctica para optimizar las ubicaciones en el almacén y disposición de los productos en un almacén o centro de distribución. Consiste en asignar de manera estratégica los artículos a ubicaciones específicas dentro del almacén. Debemos tener en cuenta factores como la demanda, el tamaño, el peso, la rotación, la proximidad y otros criterios relevantes.
El slotting se basa en técnicas y herramientas avanzadas, como Sistemas de Gestión de Almacenes (WMS, por sus siglas en inglés) y algoritmos de optimización. Estas herramientas permiten realizar análisis de simulación y modelado. Así podemos evaluar diferentes escenarios y tomar decisiones informadas sobre la ubicación de los productos.
Objetivo del slotting
El objetivo principal del slotting es mejorar la eficiencia operativa y minimizar los costes logísticos dentro de un almacén. Al colocar los productos de manera adecuada, se busca reducir los tiempos de recogida y reposición, disminuir las distancias recorridas por los empleados y optimizar la utilización del espacio disponible. Esto se traduce en una mayor productividad, una mejor utilización de los recursos y una mejora en la satisfacción del cliente.
¿Cómo aplicar esta estrategia?
La aplicación del slotting en el almacén implica seguir un proceso estructurado. Hay que entender que para optimizar la ubicación de los productos, hay que ser consciente de los criterios que se seleccionan y cómo se realiza esa organización. A continuación, se describimos los pasos fundamentales para desarrollar la estrategia de slotting:
- Recopilación de datos: El primer paso es recopilar información detallada sobre los productos, como su demanda, rotación, volumen, tamaño, peso y requisitos de manipulación. También se debe considerar información sobre las restricciones de almacenamiento y las características del almacén, como la capacidad y el flujo de trabajo.
- Análisis de los datos: Utilizando herramientas de análisis y sistemas de gestión de almacenes (WMS), se deben analizar los datos recopilados. Se pueden utilizar algoritmos de optimización para evaluar diferentes escenarios y determinar la ubicación óptima de los productos en el almacén.
- Clasificación de productos: Con base en el análisis de datos, los productos se deben clasificar en diferentes categorías en función de su demanda, rotación y requisitos de almacenamiento. Esto ayuda a identificar los productos de alta rotación, los de baja rotación, los productos perecederos y otros grupos relevantes.
- Diseño de la distribución: Utilizando el análisis de datos y la clasificación de productos, se debe diseñar la distribución óptima del almacén. Esto implica asignar ubicaciones específicas para cada categoría de productos, considerando la accesibilidad, la proximidad a las áreas de envío o recepción, y la optimización del flujo de trabajo.
- Implementación y seguimiento: Una vez diseñada la distribución del almacén, se procede a implementar los cambios. Esto puede requerir la reorganización física de los productos, la actualización de los sistemas de gestión y la capacitación del personal. Es importante realizar un seguimiento continuo y realizar ajustes según sea necesario.
- Evaluación de resultados: Es fundamental evaluar los resultados después de implementar el slotting. Se deben analizar indicadores clave de rendimiento (KPI) relacionados con la eficiencia operativa, la productividad, los tiempos de recogida y reposición, y la precisión del inventario. Esto te permitirá identificar mejoras adicionales y realizar ajustes continuos.