Con tantas nuevas tecnologías que, además, evolucionan y cambian constantemente, competir por la gestión atención e inversión, definiendo una clara estrategia digital será crítico en la estrategia comercial de las compañías de logística.
Lo digital va a ser cada vez más un desafío para el sector. Según la mayoría de los expertos, no hay otras muchas industrias en las que la correcta utilización de los datos y su análisis digital vayan a jugar un papel más importante en los próximos cinco años que en el transporte y en la logística: el sector nunca tuvo acceso a más datos y aquí hay grandes oportunidades para mejorar rendimiento y prestar un mejor servicio a los clientes. Los operadores logísticos, formando parte de un entorno digital en la cadena de valor integrada, pueden beneficiarse de análisis y diagnósticos significativamente mejorados para optimizar y planificar sus rutas.
Si a ello le sumamos el aprendizaje automático y las técnicas de inteligencia artificial para datos, la analítica puede ofrecer una verdadera solución para crear estas rutas. A su vez, la tecnología de almacenar datos en la nube puede habilitar soluciones inteligentes para las plataformas logísticas que permitan abrir nuevos modelos de negocio, como el «reenvío de carga virtual».
Estas tecnologías también pueden proporcionar flexibilidad y escalabilidad, así como estandarización y armonización de procesos en toda la organización. Esto es especialmente importante para aquellos operadores logísticos que hayan crecido a través de adquisiciones y actualmente confían en un mosaico de sistemas heredados de las empresas fusionadas.
El potencial del uso de la tecnología en la logística en general es enorme, pero hasta ahora la industria no ha sido muy diligente para aprovechar estas inmensas oportunidades. Según un reciente estudio de PWC el porcentaje de compañías de logística que están en una dimensión “avanzada” es solo del 28%, mientras que el 45% de los clientes de estas empresas que tienen esa nivel de digitalización es ya del 45%. Por eso, y para paliar este atraso, las empresas de logística tienen la obligación de invertir entre el 5 y el 9% de sus ingresos en tecnología durante los próximos años.
Articulo extraído es este artículo de PWC